lunes, 19 de julio de 2010

Bricomanía Cataclísmica.

Sí, lo sé, otra vez me he saltado una cita con vosotros, pero esta última era porqué aun no tenia terminado el motivo del post de hoy sobre cohetes espaciales. Bueno, en realidad se trata de un cohete de mentirijillas... Dejémoslo en que no llegué a terminar mis estudios sobre aeronáutica aeroespacial.

El cohete al que me quiero referir es en realidad un medidor para mi futuro heredero al que he decidido llamar Dr.Devastación. Pues bien, al acudir a una tienda especializada en productos infantiles, una tendera supervillana intentó financiar su guerra contra la libertad, la justicia y la democracia cobrándonos 80 Eurazos (= a 4 blisters de Marvel Heroes = a mi presupuesto de comics para 2 semanas y media = a una estatua de resina de Lobezno con certificado de autenticidad) por un medidor metálico (objeto dónde los padres orgullosos van marcando cada cumpleaños la altura de sus retoños) .

Evidentemente después de jurar venganza contra tamaña estafa puse a Dios por testigo de que fabricaría con mis propias manos un medidor digno del futuro heredero del trono mundial, pero no seria un medidor cualquiera, seria un cohete (a ver si así pilla la indirecta de que cuando lo sobrepase es que ha llegado la hora de lanzarse a pagar su propia hipoteca. Que yo quiero un hijo, no una lapa).

Pues bien, el pasado Domingo este era el estado en que se encontraba mi proyecto.



Pero a día de hoy después de una manita de pintura lo podéis ver en su máximo esplendor.




Con el presente post me veo en la triste obligación de despedirme momentáneamente de vosotros, ya que el Dr.Giggles (NO-premio para quien recuerde a este personaje de cómic que llegó a tener película propia) nos avisa de que el parto puede llegar dentro de esta semana adelantándose unos días sobre la previsión y evidentemente en cuando mi criaturita llegue al mundo vosotros seréis convenientemente avisados del evento para que podáis ofrecer los debidos sacrificios o donaciones (aceptamos terneros degollados, pagos en metálico, Visa y Master card).

Por cierto, hoy un agujero negro se ha tragado una tienda de productos infantiles trasladándola a la zona negativa donde ha estallado envuelta en llamas. Que cosas más raras pasan ¿No?

lunes, 5 de julio de 2010

Batmovil forever.

Antes de nada quisiera dar la bienvenida a Kraustex como nuevo seguidor de este vuestro museo y después pedir disculpas por saltarme el post de la semana pasada, pero claro, falta ya solo un mes para que llegue al mundo mi pequeño Cataclismo junior y las habitaciones para bebés ni se pintan solas ni las cunas tampoco se montan por arte de magia, y como no es plan de dejar a mi pequeño que pase sus primeras noches durmiendo en la bañera... pues eso, lo primero es lo primero.

Pero pasemos a la pieza de hoy obtenida gracias a e-bay, el Batmovil que aparecia en la pelicula "Batman forever". Sí, esa en la que apareció por primera vez Robin y empezó a jugar con la ambiguedad sexual de nuestros heroes.



Y además la oferta incluia las figuras de Batman y Robin.




Poco más os podré contar sobre Batman que no conozcais, el hombre de los planes, siempre preparado para todo y para todos, él solito diseñó la Batcueva, sus uniformes, sus gadjets, sus vehículos...Disculpémosle por un pequeño error de diseño.

Porqué... aquí tendria que haver un volante ¿no?



P.D.
Ayer visitando el blog Yametenews vi un post que me hizo mucha gracia y que podeis leer aqui (y soy tan mala persona que me fuí sin dejar ningun comentario JA,JA,JA), un plan para acabar con la raza humana realmente brillante, un plan que me ha dado que pensar... ¿Seriamos nosotros capaces de elaborar un plan de supervillano para acabar con la raza humana?

Y evidentemente yo ya tengo el mío:

Se coge una extensión de terreno de unos 900.000 km2 y en ellos se cava un agujero de unos 40km de profundidad, procedemos a atar un cable de adamantium de unos 50m de diámetro desde el fondo del agujero enrrollandolo hacia la superficie mientras se va rellenando este con hormigón armado. En el centro de nuestro terreno, en la superficie dejaremos una argolla también de adamantium.

Una vez hecho esto procedemos a realizar la misma operacion en la luna.

Después de 2 meses el hormigón ya habrá fraguado lo bastante para llevar a cabo la tercera parte de nuestro plan, en ella basta con que lanzemos un cohete con un cable que una las dos argollas y solo hay que dejar que las orbitas de nuestros respectivos planetas nos hagan el trabajo sucio. Las sucesivas vueltas irán acortando la distancia entre la tierra y nuestro satélite hasta que BOOOOOOMMM, fin de la raza humana.

Y vosotros.... ¿Ya teneis vuestro plan?